El 17 de marzo se celebra en todo el mundo el St. Patrick´s Day, el día de San Patricio, Santo Patrón de Irlanda. Aunque es una fiesta foránea, lleva ya muchos años celebrándose en nuestro país, disfrutando de la cerveza y gastronomía típicas de este día.
En casa nos encanta el chocolate y también la cerveza negra Guinness, por lo que hemos preparado este «trampantojo». Un rico pudín de chocolate y cerveza, con el aspecto de una media pinta de Guinness.
La cerveza Guinness
Una cerveza negra tipo «Stout» muy extendida y conocida por todo el mundo. Fue elaborada por primera vez por Arthur Guinness en Dublín, en el año 1759. Su principal característica es su sabor amargo, cremoso, con una espuma consistente. Una cerveza que también es usada en la elaboración de multitud de platos como la ternera estofada, el pan o los postres.
Para servirla debemos inclinar el vaso 45º, el cual llenamos hasta 3/4. Dejamos reposar la espuma un par de minutos, y luego vertemos el resto hasta llenar el vaso. La temperatura idónea de servicio es de 6-7º C.
Esta cerveza combina muy bien con el chocolate, por lo que nos hemos decidido por este pudín, que no os dejará indiferentes. Para completar el «trampantojo» también hemos rematado la copa con una especie de espuma dulce, de textura y color similares al de una auténtica Guinness.
Ingredientes:
1 lata de cerveza Guinness 500 ml.
8 yemas de huevo
200 gr. de chocolate 70% cacao
750 ml. nata de montar
225 gr. de azúcar
Con estas cantidades nos daría para 4 vasos de media Pinta, que tienen unos 280 ml. de capacidad. Pero podéis usar otros vasos o copas que más os gusten. El hecho de usar estos es por el efecto «trampantojo», simulando una cerveza Guinness auténtica.
Dificultad: media
Para 4 personas
Tiempo: 25 min. + 4 horas de frío + 20 min.
Preparación de la receta
Comenzamos por verter la cerveza en un Bol grande, despacio y con una inclinación de 45º, para que haga la menor espuma posible. La dejamos reposar para que desparezca cualquier resto de espuma.
En una cazuela, echamos 2/3 de la cerveza (33 cl.) y 600 ml. de nata. Calentamos a fuego medio y vamos mezclando. Cuando hierva, retiramos del fuego y añadimos el chocolate troceado. Removemos con unas varillas, y con el calor irá derritiéndose por completo. Reservamos.
En otro bol, separamos las claras de las yemas. Batimos éstas últimas (con unas varillas) junto al azúcar, que vamos echando poco a poco. Hasta que estén perfectamente integrados y haya aumentado el volumen.
Añadimos esta mezcla (huevo y azúcar) a la cazuela con el chocolate. Mezclamos bien, y cocinamos a fuego medio unos 15 minutos, sin parar de remover. La crema de chocolate irá espesando poco a poco, hasta adquirir la textura deseada: como un chocolate a la taza normal. Podéis darle un toque de batidora (a velocidad baja) si veis que no os ha quedado bien homogéneo.
Seleccionamos los vasos y vertemos el «pudding» hasta unos 4/5 de su capacidad. Dejaremos un espacio en la parte superior para luego echar la «espuma cervecera». Dejamos atemperar y luego introducimos en el frigorífico mínimo 4 horas, para que coja consistencia y textura. En mi caso lo he dejado de un día para otro.
Una vez pasado el periodo de frío, vamos a preparar la espuma de nuestra dulce «cerveza». El sobrante de cerveza (170 cl.) lo vertemos en un cazo y lo ponemos a fuego medio, para que vaya reduciendo y acabe siendo un jarabe. Removemos de vez en cuando para que no se nos queme. En unos 15-20 min. quedará muy reducido el líquido y obtendremos un jarabe de Guinness. Reservamos.
La nata restante (150 ml.), la vamos a montar con la ayuda de unas varillas o batidora. Comenzamos a batir, añadimos 2 cucharadas de azúcar, y continuamos. Cuando alcance ya textura y volumen, añadimos el jarabe de cerveza, 2 cucharadas más de azúcar, y batimos un poco más para que se integre el jarabe. La nata tendrá un ligero color marrón, similar al de la espuma de una Guinness.
Añadimos la nata (espuma) al pudding del vaso, rematando nuestro «trampantojo» de media pinta de Guinness. Parece una cerveza de barril recién tirada, pero en realidad es un delicioso postre. Antes de consumir, volvemos a meter en el frigorífico, por lo menos 15 min., para que enfríe la nata.
Es una auténtica «larpeirada», como decimos aquí por Galicia. Espero que os guste y celebréis el St. Patrick´s Day con esta «cerveza» tan especial.
Os dejo un pase de fotos del proceso completo de elaboración de la receta: