Para mí, y para muchos que lo han probado, es probablemente el mejor Pan del mundo. Porque hoy en día panes hay muchos, de diferentes tipos y sabores, pero al final, el que perdura en nuestra mente, es el pan “de verdad”. El que está elaborado de manera artesanal, siguiendo los métodos tradicionales y que utiliza ingredientes de primera calidad.
Dentro de las Jornadas del pan Gallego, la Asociación “Con Moita Miga” (Santiago) nos invitó a vivir una gran experiencia: conocer “in situ” la elaboración del excelente Pan de Cea. Fue la “noite branca” en “O Forno do Carlos”, situado en el pueblo de Faramontaos (Cea, Ourense).
Estamos en un momento donde resaltar los productos de calidad, que cuentan con un gran trabajo artesano detrás de ellos. Uno de estos productos, sin duda, es el Pan Gallego. Nos referimos a ese Pan que se elabora en numerosos puntos de nuestra Comunidad, siguiendo los métodos y técnicas tradicionales, que han ido pasando de generación en generación.
En épocas pasadas, donde los alimentos eran escasos, el Pan era un alimento muy apreciado. El sustento principal de las familias y el motor de la economía de muchas de ellas. Hoy en día, es tanta la presencia del pan a nuestro alrededor, que lo hemos dejado de lado y prácticamente no le damos el valor que se merece.
En la viña del señor tiene que haber de todo, desde las “baguettes” industriales a 30 céntimos hasta panes especiales con precios desorbitados. Pero sin llegar a extremos, el Pan hecho de manera artesanal -como el gallego- es el que nos merecemos degustar y disfrutar. Su textura, su sabor, y las sensaciones que nos da, son la clave de su éxito.
Nos encontramos con gente que nos dice que “el pan artesano es caro”, pero os puedo asegurar que después de vivir esta “Noite Branca”, realmente me parece muy barato.
La “peza” de pan que me traje el jueves para casa, me duró en perfecto estado hasta el lunes, ¡cuatro días después! Por lo tanto, además de ahorrarnos comprar el pan de varios días, hemos disfrutado de un gran sabor y calidad.
En “O forno do Carlos“ (Faramontaos, Cea) llevan ya varias décadas elaborando Pan de Cea, siguiendo una tradición familiar de varias generaciones. A las 4h A.M. comienza su jornada laboral y no termina hasta la noche, tras hacer 3 hornadas de pan y despachar “pezas” a los clientes que se acercan por su casa. El bloguero gastronómico Pepe Oliveira me acompañó en esta experiencia panadera, que después del madrugón, nos llevó 7 horas en compañía de la entrañable familia de Carlos e Isaura.
Para mí, este día en particular fue muy especial, ya que en mi familia paterna llevamos toda la vida comprando el Pan de Cea en “O Forno do Carlos”. Mi abuelo Manolo nos lo dio a conocer y desde entonces, no lo cambiamos por nada. Es el pan que nos da la felicidad en la mesa.
Mi agradecimiento a la asociación “Con moita miga” por esta oportunidad, a Pepe Oliveira por acompañarme y a toda la familia de Carlos e Isaura, que nos hicieron sentir como en casa.
En muy poco tiempo has logrado un reportaje perfecto, con el trabajo que llevan no están caro el pan , para mi el mejor pan . Es una pena que vendan pan con ese nombre y no tienen ni punto de comparacion, Os he seguido estos dias y la verdad que me ha encantodo vuestros reportajes , un saludo
Graciñas. Estos panaderos echan muchas horas de trabajo y merecen que se conozca lo que hacen. También hay que erradicar a los falsificadores, que hacen mucho daño al auténtico pan de Cea
Buenos dias, He oido hablar mucho del pan de Cea, del horno de Carlos, y que nunca he podido
degustarlo pues en Barcelona, donde yo vivo, no encuentro ningún horno que lo vendan.
¿podrìa yo hacerlo en mi casa,? por supuesto, que no sería igual, pero que se le pareciera……
Si fuera posible, podria, decirme mas o menos las cantidades de agua i harina i la levadura
adecuada? incluyendo el tiepo de horneado y la temperatura?
Se que estoy pidiendo quizas demasiado, pero….. por intentarlo….que no quede.
Muchas gracias, y muchas felicidades, por el reportaje, sencillo i autentico.